Acción Ecológica opina: EL SULTÁN Y EL CAMBIO CLIMÁTICO
Boletin AE
lista en accionecologica.org
Lun Feb 6 12:19:39 PST 2023
Acción Ecológica opina
aeopina
*EL SULTÁN Y EL CAMBIO CLIMÁTICO*
**
Desde hace varias décadas la Organización de Naciones Unidas está siendo
cooptada por las corporaciones. Su presencia en las instituciones de la
ONU socava los espacios e iniciativas donde se defienden los derechos y
el multilateralismo, porque solo buscan afianzar sus intereses (sus
negocios) con el dinero público y la cooperación internacional.
Un informe reciente de FIAN[i] <#_edn1> señala que buena parte de los
recursos de la *FAO* (Organización de Naciones Unidas para la
Alimentación y la Agricultura) proviene de donantes privados “que
establecen las prioridades y determinan el uso de estos recursos, con
estrictos principios de condicionalidad”. Entre estos donantes está
CropLife International (CLI), “una asociación comercial mundial cuyos
miembros son las mayores empresas de productos agroquímicos, plaguicidas
y semillas del mundo: BASF, Bayer Crop Science, Corteva Agriscience, FMC
y Syngenta”, que de esta manera tienen una vía para promover sus
plaguicidas y semillas transgénicas.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud, *OMS*, tiene acuerdos
con empresas como Bayer, y ha servido de plataforma para fortalecer la
imagen de fabricantes de vacunas como Pfizer y otras, más aún durante la
pandemia. Tampoco la UNESCO escapa de esta corporativización de Naciones
Unidas; tiene asociaciones con empresas como Google, o mediáticas como
History, criticada por transmitir documentales y programas de
investigación pseudocientíficos, y en sus inicios hasta difundir
numerosos documentales sobre la figura de Adolfo Hitler.
El *PNUMA* (Programa de Naciones Unidos para el Medio Ambiente) es
conocido por tener inversores que van desde las corporaciones
transnacionales de la conservación como WWF, Conservation International,
UICN y otras. Con ellas existe un largo recorrido de prebendas para el
sector empresarial.
A pesar de este camino de corporativización, en los años ‘70 y ‘80 el
Consejo Económico y Social de Naciones Unidas, *ECOSOC*, conformó una
comisión para desarrollar un código de conducta que regule las acciones
de las empresas transnacionales, proceso que resultó fallido y sin
participación de la sociedad civil. Igualmente, para la Conferencia de
Rio92, Naciones Unidas estableció la Comisión de Desarrollo Sustentable
(CSD), planteada en sus inicios con amplia participación de sectores
sociales, abierta y democrática, pero se fue restringiendo poco a poco,
al tiempo que abría espacios para las empresas.
En 1999, Kofi Annan, exSecretario General de la ONU, planteó en el Foro
Económico de Davos redefinir las relaciones entre el sector privado y el
sistema de Naciones Unidas, dando paso al Global Compact, que agrupa a
más de 7.000 empresas y personas de negocios de al menos 140 países.
En Río+10, la CSD se convirtió en un Foro de Alto Nivel con acceso
restringido y procesos no democráticos en la toma de decisiones. El
sector empresarial adquirió más presencia, como “parte interesada”, y
con más capacidad para incidir que muchos Estados o que las
organizaciones de la sociedad civil.
Un ejemplo escandaloso se dio en las negociaciones sobre el clima, que
iniciaron en 1995 con la *Convención Marco de Naciones Unidas para el
Cambio Climático* (UNFCCC, en inglés). Casi desde el principio,
gobiernos como los de Estados Unidos o la Unión Europea han presionado
para que las decisiones sobre cambio climático no interfieran con sus
intereses industriales y los de sus corporaciones, dependientes de la
energía fósil.
Una muestra es la rápida incorporación de esos gobiernos en las
negociaciones de los mercados de carbono y otras falsas soluciones a la
crisis climática. Detrás, siempre ha estado la mano de las corporaciones.
*LA COP 27 EN EGIPTO*
Las Conferencias de las Partes (COP) sobre cambio climático han sido
meras cumbres de negocios y un espacio para diseñar políticas
internacionales que le permitan al capitalismo petrolero seguir en su
espiral de acumulación, provocando crisis ecológicas y sociales, de las
cuales se nutre.
En las 27 COP realizadas desde 1995, las grandes empresas aparecen sin
ningún pudor en alianza con las instancias de la ONU y los gobiernos.
Esto, obviamente, bloquea propuestas concretas ante la catástrofe
climática y da impulso a las falsas soluciones que agravan el problema.
La COP 27 (Egipto, diciembre de 2022) cerró sin ninguna propuesta
concreta de dejar los combustibles fósiles en el subsuelo. Más bien
profundizó el negocio de las /compensaciones de carbono/ (offsets, en
inglés). Los más de 630 agentes del sector petrolero hicieron un buen
trabajo: la extracción de combustibles fósiles puede continuar.
La COP 27 se dio en un entorno de grave amenaza a los derechos
fundamentales. Por un lado, el carácter represivo del gobierno egipcio
impidió (algo que no había ocurrido antes) que puedan realizarse la
Cumbre de los Pueblos y la Marcha de los pueblos por el Clima. Además,
la COP se realizó en Sharm el-Sheikh, un balneario privado en el Mar
Rojo con vigilancia permanente, lleno de casinos, /resorts/ y canchas de
golf, instalado en la península del Sinaí, en tierras ancestrales de
pueblos que han sido desplazados por el ejército en varias ocasiones.
La última cumbre también será recordada por ser la de mayor presencia
corporativa en las negociaciones[ii] <#_edn2>, un 25% más que en la
cumbre anterior, en Glasgow. Como en otras COP, grandes empresas fueron
“socias” de la Cumbre: Coca-Cola (se podía beber sus productos gratis
durante toda la reunión), empresas automotrices, bancos privados,
aerolíneas, mega constructoras, empresas de bienes raíces, consultoras
financieras como Bloomberg, empresas digitales como Google, CISCO, IBM o
Microsoft.
Llegaron de la mano de delegaciones de varios países, o auspiciaban las
exhibiciones de varios Estados o de instancias de la ONU. Aquí unos
cuantos ejemplos: en el Pabellón del Agua resaltaban empresas
consultoras; JPMorgan Chase o Deutsche Bank en el Pabellón de la
Resiliencia; corporaciones estadounidenses de la conservación como NRDC,
EDF, a más de Bloomberg, en el Pabellón de la Justicia Climática; en el
stand de Nigeria se mostraban los logos de Agip, ExxonMobil, Shell
Nigeria, Chevron, Total, Indorama Petrochemicals y Pan Ocean Shipping
Company; Sudáfrica montó su exhibición con apoyo de Sasol, Escom,
AngloAmerican; Ikea, Citi y 3M fueron muy visibles en el stand principal
de la ONU. Y mezcladas entre bancos y corporaciones, transnacionales de
la conservación como The Nature Conservancy o WWF cuya expectativa de
lucro debe haberse superado con creces.
La fanfarria incluyó la participación del director ejecutivo de la
petrolera BP en la delegación del gobierno de Mauritania. Acción que se
buscó justificar con el hecho de haber firmado allí un contrato para la
construcción de proyectos de energía eólica y solar para producir
energía de hidrógeno. Aunque este no fue el único acuerdo comercial que
se firmó aquí:[iii] <#_edn3>Ursula von der Leyen como representante de
la Unión Europea suscribió un contrato para comprar minerales raros a
Kazajistán; otros para la extracción de madera de Congo, Guyana,
Mongolia, Uganda y Zambia; uno con Egipto para la compra de hidrógeno;
otro con Namibia para la adquisición de litio y cobalto. El ministro de
recursos petroleros y mineros de Egipto firmó siete memorandos de
entendimiento con Bechtel, Shell, General Electric y otras empresas, que
abarcan asuntos como tecnologías de descarbonización o estudios de
factibilidad para la obtención de amoniaco para la fabricación de
fertilizantes.
Quienes promueven las energías renovables a gran escala incluso
organizaron eventos sobre tecnologías de extracción de minerales “para
la transición”, en el lecho marino. Organizaciones de denuncia, en
contraposición, pusieron en evidencia la devastación[iv] <#_edn4> que se
provocaría con este tipo de extractivismo.
Las empresas de “energías renovables”, interesadas en desplegar
proyectos ocupando extensas zonas, principalmente en países del Sur,
tuvieron una cumbre a su favor. Hay que mencionar que uno de los
auspiciantes de las ruedas de negocios fue Neom, proyecto de ciudad en
Arabia Saudita, de 170 km en el Mar Rojo, delirio del príncipe saudí,
que tendrá solo energías renovables, robots, autos eléctricos voladores
y una luna artificial adornando el cielo.
Uno de los objetivos de quienes promueven las “energías renovables” es
alcanzar hasta 2030 un 60% de la capacidad energética global, lo que
significaría triplicar la capacidad de generación con millones de
paneles solares, aerogeneradores o proyectos de biomasa o hidrógeno, que
traería nefastas consecuencias para los territorios y la naturaleza.
*UN SULTÁN PARA LA COP28*
Siguiendo la trayectoria de intromisión de empresarios petroleros en las
cumbres del clima, la próxima COP, en Emiratos Árabes Unidos tendrá como
su presidente al sultán Al Jaber, director ejecutivo de la empresa Abu
Dhabi National Oil Company (ADNOC), una de las más grandes petroleras
del mundo y una de las 15 empresas que más gases con efecto invernadero
emiten. Estados Unidos, los países europeos y hasta el Secretario
General de la ONU celebraron esta decisión. Esto aunque el propio
Antonio Guterres dijera en Davos[v] <#_edn5> hace menos de un mes que
hay que “acabar con la adicción a los combustibles fósiles” y les
reclamara a las grandes empresas petroleras que ya conocían desde hace
más de 50 años[vi] <#_edn6> las causas del calentamiento global e
hicieron todo por ocultarlo. Claramente solo fue un discurso.
El descrédito y la ilegitimidad de las cumbres del clima es abrumador.
Consu sometimiento a los intereses de los grandes contaminadores,
contribuyen al colapso climático en lugar de combatirlo, poniendo bajo
amenaza extrema la vida. El escándalo y rechazo levantados alrededor de
un sultán petrolero que se compró la presidencia de la próxima cumbre ha
permitido aclarar más ampliamente que la respuesta está en la
resistencia frente a la expansión extractiva. El petróleo, el gas y el
carbón, deben quedarse en el subsuelo.
ACCIÓN ECOLÓGICA
6 d febrero de 2023
------------------------------------------------------------------------
[i]
<#_ednref1>https://www.fian.org/es/press-release/articulo/detengan-la-captura-corporativa-de-la-fao-2969
[ii] <#_ednref2>GLOBAL WITNESS. Over 100 more fossil fuel lobbyists than
last year, flooding crucial COP climate talks.
10/11/2022.https://www.globalwitness.org/en/press-releases/over-100-more-fossil-fuel-lobbyists-last-year-flooding-crucial-cop-climate-talks/
<https://www.globalwitness.org/en/press-releases/over-100-more-fossil-fuel-lobbyists-last-year-flooding-crucial-cop-climate-talks/>
[iii] <#_ednref3>LRB. Short Cuts: In Sharm el-Sheik. Vol. 44.No. 23.
hhttps://www.lrb.co.uk/the-paper/v44/n23/laleh-khalili/short-cuts?utm_medium=email&utm_campaign=20221123newissue&utm_content=20221123newissue+CID_d9aa6434c886760377731e16e07b0b17&utm_source=LRB%20email&utm_term=Read%20more
<hhttps://www.lrb.co.uk/the-paper/v44/n23/laleh-khalili/short-cuts?utm_medium=email&utm_campaign=20221123newissue&utm_content=20221123newissue+CID_d9aa6434c886760377731e16e07b0b17&utm_source=LRB%20email&utm_term=Read%20more>
[iv] <#_ednref4>Introducción a la minería en aguas profundas.
https://www.savethehighseas.org/wp-content/uploads/2020/06/1.-DSM_-Intro_2022.pdf
[v]
<#_ednref5>https://www.climatica.lamarea.com/antonio-guterres-petroleras-gran-mentira/
[vi]
<#_ednref6>https://www.climatica.lamarea.com/exxonmobil-retardismo-estudio-2023/
------------ próxima parte ------------
Se ha borrado un adjunto en formato HTML...
URL: <http://lists.accionecologica.org/pipermail/boletin-accionecologica.org/attachments/20230206/3c202244/attachment-0001.htm>
------------ próxima parte ------------
Se ha borrado un mensaje adjunto que no está en formato texto plano...
Nombre : AE logo opina.jpg
Tipo : image/jpeg
Tamaño : 34213 bytes
Descripción: no disponible
Url : <http://lists.accionecologica.org/pipermail/boletin-accionecologica.org/attachments/20230206/3c202244/attachment-0001.jpg>
Más información sobre la lista de distribución Boletin